miércoles, 15 de febrero de 2012

MENSAJE DEL SEÑOR JESUS 7 DE FEBRERO DE 2012

MENSAJE URGENTE, URGENTE, URGENTE
DE + JESUCRISTO  + JESUCRISTO  + JESUCRISTO
REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES,
DEL CIELO, DE LA TIERRA
Y DE TODA LA HUMANIDAD


7 DE FEBRERO DE 2012
HORA: LA QUE ESTAIS VIVIENDO
MEDELLIN, COLOMBIA
¡OH! PEQUEÑOS NIÑOS DE MI CORAZON PATERNAL,
MI PADRE DIOS YAHVE ESTA ENOJADO,
POR LA MITAD DE LA HUMANIDAD DESOBEDIENTE

+  Bendiciones,  + Bendiciones,  + Bendiciones, de vuestro Padre Jesucristo, Rey de reyes y Señor de señores, a media humanidad en el mundo entero.

Hoy vengo nuevamente con mi Sacratísimo Corazón traspasado de dolor, por la desobediencia de media humanidad en el mundo entero, ya se acortan los días de vuestra vida de pecado y muchos no se quieren arrepentir, ni se quieren arrepentir de sus faltas, no se quieren preparar para nuestra venida a la tierra por segunda vez.

Muchas veces les hemos advertido, y todos los del cielo hemos bajado a advertirlos de los peligros inminentes que se acercan para toda la humanidad, ya a muchos les he tocado, haciéndoles estremecer sus conciencias y muy especialmente para los países que han vivido los terremotos hasta de 8 puntos  en la escala de Richter.  ¿O es que pensáis que esto es un juego de niños? ¿Qué les hace falta ver? ¿Cómo caen edificios enteros y los ríos inundan las ciudades? ¿Y se entretienen viendo esto como juegos pirotécnicos?  ¡Oh! mis niños que equivocados estáis.

Pues les digo mis niños; a la media humanidad que mi Padre Dios Yahvé se refiere, y Yo Jesucristo, Rey de reyes y Señor de señores, les recuerdo aunque sea por última vez, algunos llamados en nuestras Santas Escrituras, pues Yo Jesucristo, Rey de reyes y Señor de señores, les digo que habrá en efecto una gran calamidad sobre la tierra y cólera contra este pueblo, y caerán a filo de espada, y serán llevados cautivos a todas las naciones y Jerusalén será pisoteada por los gentiles, hasta que se cumpla el tiempo de los gentiles.

Yo Jesucristo, Rey de reyes y Señor de señores, les digo y les recuerdo: el que tenga oídos, que oiga lo que mi Padre Dios Yahvé le dice a la media humanidad desobediente, y para todos los que son escribas y fariseos, humanamente escribas y fariseos:

1.       Ay de vosotros escribas y fariseos hipócritas, que cerráis a los hombres el reino de los cielos.  Vosotros ciertamente no entráis; y a los que están entrando, no los dejáis entrar.
2.       Ay de vosotros escribas y fariseos hipócritas, que recorréis mar y tierra para hacer un prosélito  y cuando llega a serlo, le hacéis hijo de condenación, el doble que vosotros.
3.       Ay de vosotros, guías ciegos que decís:  Si uno jura por el santuario, eso no es nada, mas si jura por el otro; por el oro del santuario, queda obligado.  ¡Insensatos y ciegos!
4.       Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que pagáis el diezmo de la menta, del aneto y del comino, y descuidáis lo mas importante de la ley: La Justicia, la Misericordia y la Fe.  Esto es lo que había que practicar, aunque sin descuidar aquello.  Guías ciegos que coláis el mosquito y os tragáis el camello.
5.       Ay de vosotros, escribas y fariseos hipócritas, que purificáis por fuera la copa y el plato, mientras por dentro están llenos de rapiña e intemperancia.  Fariseos ciegos; purifica primero por dentro la copa, para que también por fuera quede pura.
6.       Ay de vosotros escribas y fariseos hipócritas, pues sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera parecen bonitos, pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia.  Así también vosotros, por fuera parecéis justos ante los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresías y de iniquidad.
7.       Ay de vosotros escribas y fariseos hipócritas, ¿Por qué edificáis los sepulcros de los profetas y adornáis los monumentos de los justos, y decís: “Si nosotros hubiéramos vivido en el tiempo de nuestros padres, no habríamos tenido parte con ellos en la sangre de los profetas”?.  Con lo cual atestiguáis contra vosotros mismos, que sois hijos de los que mataron a los profetas.  ¡Colmad también vosotros la medida de vuestros padres!

Serpientes, raza de víboras, ¿Cómo vais a escapar a la condenación de la gehena?.   Por eso he aquí que Yo envío a vosotros, profetas sabios y escribas: a unos los mataréis y los crucificaréis, a otros los azotaréis en vuestras sinagogas y los perseguiréis de ciudad en ciudad, para que caiga sobre vosotros toda la sangre inocente derramada sobre la tierra, desde la sangre del inocente Abel, hasta la sangre de Zacarías, hijo de Baraquías, a quien matasteis entre el santuario y el altar.  Yo os aseguro:  Todo esto recaerá sobre vosotros y esta generación.

Es así como Yo, Jesucristo, Rey de reyes y Señor de señores, les refresco la memoria con estas palabras tan duras y tan claras.  Estas son santas palabras dichas y escritas desde el Antiguo Testamento, hasta hoy el Nuevo Testamento, siempre diciendo la verdad, y por ella morí, hasta entregar mi vida por cada uno de vosotros.

¿Qué estáis esperando? ¿O es que me vais a pedir mas señales para ponerme a prueba?.  Al atardecer decís: “Va a hacer buen tiempo, porque el cielo tiene un rojo de fuego”, y a la mañana: “Hoy habrá tormenta, porque el cielo tiene un rojo sombrío”.  ¿Cómo sabéis discernir el aspecto del cielo y no podéis discernir las señales de los tiempos?.

Generación malvada y adúltera:  Una señal pide y no se le dará otra señal que la señal de Jonás.

¡Oh! mis pequeños niños de media generación desobediente, Mi Padre Dios Yahvé está enojado, y Yo Jesucristo, Rey de reyes y Señor de señores, les sigo recordando estas santas palabras:  Habrán señales en el sol, en la luna, en las estrellas y en la tierra.  Angustia de las gentes perplejas por el estruendo del mar y de las olas, muriéndose los hombres de terror y de ansiedad por las cosas que vendrán sobre el mundo.  Porque las fuerzas de los cielos serán sacudidas y entonces verán venir al Hijo del hombre en una nube con gran Poder y Gloria.

Cuando empiecen a suceder estas cosas, cobrar ánimo y levantad la cabeza, porque se acerca vuestra liberación.

¡Oh! mis pequeños hijos de media generación desobediente, que pasáis frente a los acontecimientos de desastres naturales y decís:  “Esto a  mí no me hace ni cosquillas y siempre sois indiferentes a estos desastres.  Pues bien, esperadme un poquito, que ya voy a tocar las puertas de vuestro corazón, a ver si así me obedecéis un poco, un poco y un poco.

En este recordar tan urgente, urgente, urgente, es necesario que recapacitéis ya, antes de que llegue el día de mañana y no tengáis que lamentar amargamente, y llorar, y llorar, y llorar sobre vuestra propia desobediencia.  Y se despide vuestro Jesucristo, Rey de reyes y Señor de señores.  +  Bendiciones  + Bendiciones  + Bendiciones.  Amén. Amén.  Amén.

Instrumento anónimo
Medellín, Colombia

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